CELIA CASADO: Estudiar en la universidad es "una experiencia dura pero bonita"

Celia es una alumna en prácticas del Máster para Profesor de Educación Secundaria en el IES Misericordia 26, que da clases particulares en su tiempo libre. Hemos decidido entrevistarla porque nos parece interesante que alguien que acaba de terminar los estudios nos cuente su experiencia.

¿Qué ha estudiado y por qué?

"He estudiado la carrera de Filología Hispánica, porque siempre me he sentido interesada por el estudio de la lengua y la literatura, y además me gusta leer. También tengo la influencia de mi familia, porque mis padres han estudiado la misma carrera."

¿Fueron fáciles los primeros años en la universidad?
"Los primeros años son un poco de tanteo, de ver un poco dónde estás, saber qué es lo que quieres. Se pasa un poco de nervios,  porque tienes que decidir y darte cuenta de lo que quieres, observar la diferencia respecto a los estudios que has cursado y comprobar por ti mismo que estás en una etapa ya totalmente diferente en la que tienes que organizarte mejor el tiempo, en la que la manera de estudiar es completamente diferente porque, aparte de que tienes más contenidos sobre los que trabajar, son también de la especialidad que tú has escogido y se te añaden trabajos. En ese sentido, los primeros años son un poco complicados, pero, una vez que entiendes dónde te encuentras, es bonito continuar con la ilusión de acabar y buscar el futuro que quieres. Además, conforme sigues estudiando, las notas van mejorando,  porque los primeros años se puede decir que son un poco para que te estrelles, que veas dónde estás y, una vez ahí, ya reaccionas, sabes por dónde tienes que ir y todo empieza a cambiar a mejor."

¿Alguna asignatura que le gustara más?

"A mí me gustan más personalmente las del área de lengua. Hemos tenido tanto asignaturas de lengua como de literatura y las que más me gustan son las de la parte de lengua, gramática y todo el apartado de sintaxis. Pero todo depende también del profesor que te da la clase, que a lo mejor te da literatura y hace que te guste la asignatura por la manera en que la da, o puede pasar al revés: que te guste mucho la lengua, pero un profesor la da de una manera que hace que no te guste. Pasa mucho eso..."

¿Y alguna que le costara mucho?

"Tuve una asignatura especialmente complicada, la de Semántica española, en la que, además del temario impartido, que era muy complejo, había que leer bastantes libros y todos ellos de bastante complejidad: empleaban un lenguaje muy complejo más terminología muy especializada en teorías de diferentes autores. Costaba bastante comprender una idea y luego, además, relacionarla con un autor y no confundirte con otro. Era mucho leer y  mucho estudiar, y el examen he de reconocer también que fue complicado. Pero al final, como hubo esfuerzo, conseguí aprobarla.  Es una de las asignaturas por las que recuerdo que más sufrí durante la carrera."

De trabajo de final de carrera, ¿qué hizo?

"De trabajo de final de grado, como se llama ahora, hice una investigación sobre el español coloquial, a partir de un corpus del grupo Valesco, en el que quise centrarme en el tema de la sintaxis, que es el que más me atrae. Estuve comparando cómo se habla en determinados contextos, cómo hablamos en una situación formal, cómo lo hacemos en situaciones informales, qué estructuras sintácticas utilizamos en unos casos y otros, y a partir de ahí hacer mi valoración personal. De hecho, para este año, para el trabajo de fin de máster, quiero continuar más o menos en esa línea, porque es un tema sobre el que ya me he informado, tengo experiencia del año pasado y, como me gustó, quiero profundizar un poco."

¿Algún profesor en particular del que haya aprendido mucho?
"Precisamente el profesor que llevó mi trabajo de final de carrera, que además me dio clase del área de lengua, con él tuve clases de fonética y fonología, también de sintaxis. Yo creo que ha sido uno de los profesores con los que más he podido aprender, porque, además de que demostraba ser experto en aquello que impartía, tenía mucha capacidad para trasmitirlo y se permitía en clase, de vez en cuando, gastar alguna broma y hacer la clase más dinámica. Tenía mucho sentido del humor pero, al mismo tiempo, nunca perdía los papeles y sabía muy bien a dónde nos quería llevar. Se planificaba muy bien el tiempo y ha sido uno de los profesores que más me ha ayudado, aunque en verdad he aprendido de todos un poco."

¿Cómo resumiría su experiencia durante la carrera?

"Fue una experiencia dura pero bonita, porque te das cuenta de que tienes que aprender a organizarte muy bien el tiempo por el esfuerzo que requiere aprobar las asignaturas."

Y el máster, ¿cómo funciona?, ¿por cuatrimestres?

"Sí, bueno... Depende de las asignaturas. Hay asignaturas que duran todo el año, otras solo cuatro meses, en función de la importancia.  Ahora que estoy en practicas, las clases nos las han cortado hasta abril que volvemos. Después ya las retomaremos y hasta mayo; luego, ya en junio, exámenes, y en julio la presentación  de nuestra investigación."

De asignaturas del máster, ¿la que más le gusta?

"La asignatura que más me gusta es la de Psicología, la hemos tenido como asignatura cuatrimestral y me ha parecido muy interesante, porque hemos tratado todo el tema de la adolescencia, cómo impartir clase a alumnos de esta edad, tener en cuenta el carácter, así como la capacidad con la que cuentan. Y me ha parecido muy interesante aparte porque el temario era muy bonito, porque es una manera muy útil de acercarnos a la realidad de lo que nos vamos a encontrar, porque, por mucho que sepamos los contenidos de la materia que nos enseñen, tenemos que saber transmitirlos teniendo en cuenta la edad de las personas con las que tratamos para que te escuchen." 

¿ Y la qué más le cuesta?

"La que más me cuesta es una que estamos teniendo ahora todo el año que se llama Procesos y contextos educativos en la que tenemos que aprendernos bien toda la evolución del sistema educativo, prácticamente desde el S.XIX hasta ahora todas las leyes,  así como las funciones de todo el equipo docente, comprender el papel de los tutores, del director, del jefe de estudios. Me parece la más complicada, pero también quizá es la que nos resulte más útil porque necesitamos conocer el funcionamiento de un centro."

¿Qué tal su experiencia durante las practicas en este centro?
"La verdad es que se me ha hecho un poco corto porque empezamos una semana tarde y es una etapa bonita en la que disfrutas. La definiría como una experiencia muy buena en la que estoy aprendiendo mucho y se me está preparando muy  bien de cara a los próximos años para poder empezar a dar clase. Estoy conociendo de cerca aquello con lo que me voy a encontrar porque, por mucho que te expliquen el comportamiento de los alumnos, cómo tienes que dar clase, hasta que no llegas a un centro y ves lo que sucede en las aulas, no aprendes de verdad."

¿Ha dado clase?
"Ya he empezado a dar clase a los alumnos de 1º y 2º de bachillerato, y 3º de la ESO, que son los grupos que lleva Mara, y la verdad es que me esta orientando muy bien.  Me dice tanto lo que hago bien como lo que hago mal y, en ese sentido, corregirme los errores me parece muy útil, porque estoy aprendiendo cómo mejorar, controlar esos fallos que sobre todo tienen que ver con el control de la mirada,  nervios, tonos de voz..."

Tras una larga charla con Celia Casado, pudimos conocer un poco más a fondo la experiencia de un universitario aspirante a profesor, el esfuerzo que requiere y todo lo que se aprende en esta etapa: si nos lo proponemos, lo logramos.